Comparto plato es una web en la que puedes comprar comida a supuestos particulares que no siempre son tan particulares. Yo me encontré en compartoplato.es con muchos restaurantes y bares que se aprovechan de la economía colaborativa para encontrar clientes. Hacen bien, por supuesto. En el amor, en la guerra y en los negocios vale todo, como dice mi suegra.
Mi hermana compró a través de esta web una tarta preciosa para el cumpleaños de mi sobrina que le salió en 20 euros. Por el mismo precio la hubiera comprado en una pastelería. Incluso le podía haber salido más barata. La que compré yo ayer para las niñas me costó 8 euros en una pastelería de mi barrio.
Mi hermana quedó a cuadros cuando el cocinero le dio la dirección de recogida y resultó ser la dirección de un restaurante de barrio que le quedaba bastante cerca de casa. a mí no me sorprende. La crisis económica aprieta y la gente espabila para conseguir ingresos. Mi hermana había pasado mil veces por delante del restaurante del cocinero de la tarta y no sabía que preparaba unas tartas tan ricas y tan bien presentadas. Ahora es clienta del restaurante.
Os recomiendo compartoplato.es tanto si quieres conseguir comida como si quieres vender la comida que haces en casa. Puedes ganar un dinerito. Es lo que está empezando a hacer mi suegra. Cuando le hablé de compartoplato.es, se hizo una cuenta y ya han venido a recogerle sus famosos macarrones con queso Montecastillo rayado varias veces. La web es muy intuitiva. Cuando entras, te sale en la pantalla un listado de cocineros que ofrecen sus comidas lo más cerca posible de tu casa o de donde te conectas a Internet. Lo he podido comprobar cuando me conecté desde hoteles y me han salido comidas que se recogían en los alrededores del hotel. Esto resulta muy práctico, tanto si estás en tu dulce hogar como si estás de vacaciones en un hotel o piso alquilado. Personas de todas las ciudades de esta España nuestra se apuntan a vender sus comidas. Digo bien: vender. En compartoplato.es nadie regala nada, pero todos compartirían su comida con Mariano Rajoy.
Mi hermana compró a través de esta web una tarta preciosa para el cumpleaños de mi sobrina que le salió en 20 euros. Por el mismo precio la hubiera comprado en una pastelería. Incluso le podía haber salido más barata. La que compré yo ayer para las niñas me costó 8 euros en una pastelería de mi barrio.
Mi hermana quedó a cuadros cuando el cocinero le dio la dirección de recogida y resultó ser la dirección de un restaurante de barrio que le quedaba bastante cerca de casa. a mí no me sorprende. La crisis económica aprieta y la gente espabila para conseguir ingresos. Mi hermana había pasado mil veces por delante del restaurante del cocinero de la tarta y no sabía que preparaba unas tartas tan ricas y tan bien presentadas. Ahora es clienta del restaurante.
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