No le sale una bien al PP. Cuando Cataluña está luchando por su independencia, en Madrid aparece el ébola multiplicado en las enfermeras que atendieron a los misioneros. Era previsible. El PP traía el virus pagando el viaje con los impuestos de todos. Pero, eso sí, lo hacía por motivos humanitarios. Había que contentar a los curas.
Ahora no saben qué hacer. Hasta tienen problemas para matar al perro de la primera enfermera contagiada. El marido ya ha contratado a una abogada para salvar al can del más allá. Aquí valen más los perros que las personas.
Por supuesto, los del PP de nuestro Mariano no traerán a más misioneros contagiados. Han aprendido la lección tarde, pero la han aprendido. En EEUU no se contagiaron con el virus. En España volvimos a ser diferentes gracias al PP. Esta derecha nuestra no tiene precio. Por eso la seguimos votando los imbéciles.
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